2 DE FEBRERO: DÍA DE LA VIDA CONSAGRADA.

Unos 400 jóvenes entraron como novicios en 2013 a alguna de las más de 6.000 comunidades y congregaciones religiosas que hay en España, una cifra que se mantiene estable en los últimos años y a la que hay que sumar la de monjes y monjas de vida contemplativa (clausura), de la que no hay estadísticas. Todos ellos celebran este domingo la Jornada Mundial de la Vida Consagrada.

Según la Conferencia Española de Religiosos (CONFER), en España hay unos 45.100 religiosos y religiosas de vida activa con una media de edad de 63 años. De ellos, el 6% son extranjeros y el 76% son mujeres. Además, hay 407 congregaciones y 5.700 comunidades religiosas -de las que 4.000 son femeninas-, todas ellas dedicadas a la vida activa -atención sanitaria, a inmigrantes, educación, etcétera-.
El presidente de la CONFER, Luis Ángel de las Heras, ha indicado que los religiosos y religiosas afrontan el 2014 con «esperanza» aunque «conscientes de las dificultades» como el «envejecimiento» de la vida religiosa y la escasez de vocaciones. A su juicio, la vida consagrada es una opción para los jóvenes, «un proyecto alternativo» para «dar testimonio de alegría y esperanza en medio de tanta crisis y tantos problemas». De hecho, apunta que los religiosos a veces se ven «desbordados» por las necesidades de la gente. Por ello, piden al Gobierno, tanto al actual como a los próximos, «que se preocupe por los más afectados por la crisis, los desfavorecidos, los que están en paro, los inmigrantes y que defienda la vida y la dignidad de las personas».