Según la Conferencia Española de Religiosos (CONFER), en España hay unos 45.100 religiosos y religiosas de vida activa con una media de edad de 63 años. De ellos, el 6% son extranjeros y el 76% son mujeres. Además, hay 407 congregaciones y 5.700 comunidades religiosas -de las que 4.000 son femeninas-, todas ellas dedicadas a la vida activa -atención sanitaria, a inmigrantes, educación, etcétera-.
El presidente de la CONFER, Luis Ángel de las Heras, ha indicado que los religiosos y religiosas afrontan el 2014 con «esperanza» aunque «conscientes de las dificultades» como el «envejecimiento» de la vida religiosa y la escasez de vocaciones. A su juicio, la vida consagrada es una opción para los jóvenes, «un proyecto alternativo» para «dar testimonio de alegría y esperanza en medio de tanta crisis y tantos problemas». De hecho, apunta que los religiosos a veces se ven «desbordados» por las necesidades de la gente. Por ello, piden al Gobierno, tanto al actual como a los próximos, «que se preocupe por los más afectados por la crisis, los desfavorecidos, los que están en paro, los inmigrantes y que defienda la vida y la dignidad de las personas».